Cuerpo 2.0

El entrenamiento de alta intensidad es una de las opciones de que más rápidamente se están introduciendo en la rutina de ejercicios de muchos deportistas. La búsqueda de repeticiones basadas en la calidad de las mismas y con la meta de provocar el agotamiento muscular momentáneo, son la base de los entrenamientos de alta intensidad. Hasta  ahora,  se entendía que trabajar en la linea de la alta intensidad se obtenía fuerza con la consiguiente ganancia en cantidad y calidad muscular, mas ahora también se ha descubierto que es muy importante la forma de afrontar este tipo de entrenamientos para mejorar la condición aérobica.
Antes de nada, hay que señalar que los entrenamientos de alta intensidad están indicados para todas las personas con una buena forma física pero además, este tipo de rutinas puede ayudar a deportistas que se encuentren en un punto de estancamiento y para aquellos que psicológicamente necesiten variar la rutina. También, añadir que recientes estudios han demostrado que los entrenamientos de alta intensidad más eficaces a largo plazo son los divididos en tres sesiones por periodos de 7 días, es decir, tres veces por semana, ya que más entrenamiento provoca un cansancio muscular que hace imposible la recuperación del cuerpo para establecer la mejora.

A partir de aquí, te damos una nociones para que puedas iniciarte en el entrenamiento de alta intensidad:

- Se ataca atacan todos los músculos en cada sesión.

- Tres entrenamientos por semana.

- Un ejercicio por músculo.

- Ejercicios “concentrados” y lentos.

- Máximo repeticiones (hasta el fallo muscular)

- Descanso entre ejercicios vital (tres minutos y medio de reloj)

Con estas premisas podrás iniciar un camino hacía la mejora de tu estado físico. Ten presente que la intensidad de este tipo de entrenamientos lo ponen las repeticiones, la calidad de las mismas y el fallo. Nuestro cuerpo debe recibir el mensaje de que tienes que mejorar para evitar el punto de “fallo”.

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